Ayudar a un cliente a descubrir y decidir sobre un logo siempre es interesante. A veces, el cliente tiene una idea muy clara de lo que le gustaría y es mi trabajo convertir eso en un producto tangible y listo para el mercado. A veces no tienen idea, pero realmente saben lo que les gusta y lo que no les gusta. A menudo, aterrizan en algún punto intermedio: tienen algunas ideas, pero confían en mí, el diseñador, para crear una variedad de imágenes que amplíen estas ideas junto con algunas en las que quizás aún no habían pensado.

Aquí, comparto un par de páginas que ilustran la variedad de diseños que proporciono a los clientes con la esperanza de encontrar esa imagen que resuene y ayude a capturar lo que las palabras por sí solas no pueden.